El Shot Diario

La Cámara de Diputados aprobó en primera lectura el proyecto que crea la Dirección Nacional de Inteligencia (DNI), llamada a sustituir al antiguo Departamento Nacional de Investigaciones.
Pero ojo: no es la primera vez que esta ley pasa por el Congreso.

En 2024, el Tribunal Constitucional la tumbó por violar derechos fundamentales.

🚨 ¿Qué fue lo que prendió la alarma en 2024?

El problema mayor fue el famoso artículo 11.

Ese artículo permitía que el DNI:

pidiera información a cualquier persona, empresa o institución
sin orden judicial
y con sanciones penales para quien se negara

Periodistas, juristas y sociedad civil advirtieron que eso abría la puerta a:

violaciones a la privacidad
atropellos al debido proceso
riesgos para la libertad de prensa (incluida la revelación de fuentes)

¿Qué cambió en la versión de 2025?

Tras la sentencia del TC y la presión pública, el Ejecutivo retiró y corrigió el proyecto.

El cambio clave:
👉 El DNI ya no podrá exigir información ni documentos sin una orden judicial.

Esta versión ya fue aprobada en el Senado y ahora pasó la primera lectura en Diputados.

¿Entonces por qué la oposición sigue en contra?

Porque, aunque se quitaron los puntos más peligrosos, dicen que el diseño del DNI sigue siendo riesgoso.

Sus principales críticas:

Concentración de poder: el DNI dependerá directamente del presidente
Poca fiscalización: no hay controles externos fuertes ni auditorías independientes claras
Riesgo a futuro: las amplias atribuciones podrían usarse mal con otro gobierno

¿Klk con el DNI?

Según el proyecto, el organismo podrá:

investigar amenazas a la seguridad nacional
analizar riesgos dentro y fuera del país
actuar frente a acciones que afecten la soberanía
apoyar la lucha contra el crimen organizado

¿Ya es ley?

No todavía.

Falta:

segunda lectura en la Cámara de Diputados
y ahí es donde se definirá

La pregunta de fondo sigue siendo la misma:

¿Quién vigila al que vigila?

El debate ahora no es solo si el país necesita inteligencia,
sino qué tan poderoso será el DNI y quién lo controlará de verdad.