Fiesta de Pensiones en RD… pero solo para los VIP 💸

Santo Domingo, RD – En la República Dominicana, el Estado está en plena "fiesta de pensiones especiales", ¡pero solo para unos pocos privilegiados! Desde hace más de 10 años, se destinan más de RD$425 millones al mes (¡sí, leíste bien!) a ex funcionarios, altos oficiales y algunos civiles, mientras el salario promedio apenas llega a RD$19 mil.

Según un reportaje de Julissa Céspedes, este fenómeno ha crecido sin control, con pensiones que van desde RD$50 mil hasta RD$405 mil mensuales. Las cifras son alarmantes, y la legalidad de estos pagos está en entredicho. Muchos de estos beneficios se han otorgado por decretos presidenciales, lo que genera dudas sobre su justificación.

¿Quiénes son los afortunados?

Las pensiones más jugosas van para miembros de la Policía Nacional. Aquí van algunos ejemplos:

• Alejandro Dipré Sierra: RD$405 mil
• Neivis Luis Pérez Sánchez: RD$405 mil
• José Sigfredo Fernández Fadul: RD$399 mil

Mientras tanto, los oficiales activos solo ganan un poco más de RD$54 mil. ¡Una diferencia abismal!

Los Políticos en la Lista

Encabezando la lista de expresidentes con pensiones privilegiadas están Danilo Medina, Leonel Fernández e Hipólito Mejía, cada uno recibiendo RD$315 mil mensuales. También figuran exvicepresidentes como Margarita Cedeño y Rafael Alburquerque, quienes perciben RD$280 mil al mes. ¿Y qué tal el exministro Gustavo Montalvo? ¡Se lleva RD$210 mil mensuales! Todo esto, por supuesto, ¡pagado con el dinero del Estado!

¿Y qué pasa con el resto?

Mientras expresidentes y altos mandos disfrutan de pensiones de lujo, miles de jubilados lidian con montos que apenas cubren sus necesidades. En total, al 30 de junio de 2024, el sistema cuenta con 234,243 pensiones que suman más de RD$10,800 millones. En solo tres años, el costo de estas pensiones ha pasado de RD$1,800 millones a más de RD$10,000 millones. ¡Una locura!

El abogado Manuel Fermín pide a gritos que se revise esta situación, ya que el impacto en las finanzas públicas y la estabilidad económica del país podría ser devastador.

En resumen, esta fiesta de pensiones parece un juego de unos pocos, mientras el pueblo ve cómo se desangran los recursos del Estado.