Habra luz al final del tunel? Todo lo que debes saber del lío de Edesur

Y el apagón no tiene fin…

Todos sabemos que a Edesur la cosa se le ha puesto fea, pero la gente que vive al oeste de la Máximo Gómez, desde el Distrito hasta la frontera con Haití, lo siente más. Y es que con el calor sofocante, los apagones de 12 horas ya son la norma en algunas áreas.

Para colmo, ni el mismo Estado se escapa. Por ejemplo, la juramentación de los nuevos diputados al Parlacen tuvo que ser suspendida por un apagón en el Congreso. Y ayer, en la Dirección General de Pasaportes, arrancaron el día tarde porque una "falla eléctrica" afectó su data center. Aunque esto último no fue culpa directa de Edesur, el caos eléctrico sigue siendo una realidad.

¿Cuál es el problema real?

El país produce suficiente energía, pero el lío está en la distribución, que es responsabilidad de las Ede. Las famosas "pérdidas" en la distribución están alrededor de un 39% entre las tres Ede. Esto significa que de cada 100 gigavatios/hora que compran, solo cobran 61. Así que el gobierno tiene que inyectar más de mil millones de dólares al año para cubrir esas pérdidas, lo que contribuye significativamente al déficit fiscal.

En el caso de Edesur, parte del problema es que sus líneas y subestaciones están más viejas que un carro del 70. Esto no solo genera pérdidas, sino que deja a la gente sin luz, porque en tiempos de alto consumo, estas instalaciones antiguas no dan para más. Aunque se ha hablado de invertir cientos de millones de dólares en modernizarlas, está claro que la situación se ha salido de control por una gestión deficiente.

Y ahí entra Celso…

Celso Marranzini, jefe del Consejo Unificado de las Ede, echó la culpa a Milton Morrison, exjefe de Edesur, por la tardanza en gestionar la compra de 900 transformadores en 2022. Según Celso, hasta hace poco no se había mandado un técnico a China para recibirlos. Milton, ahora al frente del Intrant, intentó defenderse diciendo que su gestión fue transparente, pero cuando tu propio jefe te llama la atención, se complica justificarte.

El retraso en los transformadores no parece tan grave, pero las consecuencias son serias. Mientras esperan la llegada de 2000 transformadores nuevos, Edesur tiene que apañárselas con equipos prestados o reparados. Y si sumamos esto a las 32 subestaciones sobrecargadas, ya puedes imaginar el desastre.

¿Habrá una solución?

Depende de dónde vivas, pero Celso asegura que hay un plan. El detalle es que se les hizo tarde y ahora toca apretarse los cinturones. A corto plazo, planean rotar subestaciones y hacer mantenimientos, y cuando baje el calor, se espera que la situación mejore un poco.

A largo plazo, la idea es invertir 650 millones de dólares (obviamente prestados) para modernizar las redes y los medidores. También tienen en mente permitir que el sector privado, que suele ser más eficiente, opere y mantenga las Ede, aunque sigan siendo propiedad del Estado.